Durante el embarazo de una perra se producen muchos cambios en su cuerpo y en su comportamiento. Estos cambios pueden ser muy difíciles de detectar durante las primeras semanas de gestación. En este blog te daremos algunas claves que te ayudarán a reconocer los síntomas de una perra embarazada y las pruebas que se pueden realizar para detectar la llegada de cachorros.
- Puede producirse una ligera secreción de flujo alrededor de un mes después del apareamiento.
- Sus mamas pueden destacarse en color y tamaño unos treinta días después del apareamiento.
- Tu perra puede vomitar algo en las primeras fases de la gestación. Si los vómitos no cesan o si hay algo que te preocupe, consulta a tu veterinario.
- Empezará a ganar peso alrededor del día 35 de la gestación, el cual irá aumentando gradualmente hasta alcanzar un 50% más del peso habitual.
- Pueden empezar a notar su barriga hinchada a partir del día 40. Las mamás primerizas y las perras que están gestando una camada pequeña apenas muestran cambios.
- Es posible que esté más apagada de lo habitual o que pierda apetito. Estas señales también pueden indicar algún problema; consultaselo a tu veterinario si estás preocupado.
- El apetito de tu perra aumentará (y más con sus croquetas balú) en la segunda mitad de la gestación.